Alta Sensibilidad

Niños/as Altamente Sensibles:

comprendiendo el rasgo y apoyando su desarrollo

La Alta Sensibilidad es un rasgo de la personalidad que implica una mayor sensibilidad y capacidad de percibir y procesar estímulos tanto emocionales como sensoriales en comparación con la mayoría de las personas. Este rasgo fue presentado por Elaine Aron, considerando no como un trastorno, sino como una variación natural de la personalidad, que afecta a un 15-20% de la población. La población infantojuvenil Altamente Sensible poseen una sistema nervioso más receptivo, lo que se traduce a una mayor atención a los detalles, una profunda capacidad de procesamiento y una mayor sensibilidad tanto emocional como sensorialmente. Este rasgo es parte de la diversidad humana que puede favorecer a la persona que lo posee, contribuyendo a la creatividad, la empat´ía y una apreciación más profunda de la vida, aunque asimismo puede generar problemas que pueden afectar su bienestar personal y emocional.

Existen una características comunes de los niños/as con Alta Sensibilidad, tales como ser unos niños/as muy observadores y prudentes, suelen ser niños y niñas que no arriesgan y si no están seguros de sus actos, prefieren no actuar, o quedarse manteniendo el papel de observador. Suelen tener una excelente capacidad de observación del lenguaje no verbal de las otras personas, con tendencia a cuidar y preocuparse por los demás, por lo que hace que mantenga unas sólidas relaciones. Además, son personas muy intuitivas, reflexivas y creativas.

Qué características deben cumplir estos niños/as para considerarse

Niños Altamente Sensibles (NAS)*

*Según los estudios realizados por Elaine Aron

Profundidad de procesamiento

Los niños/as NAS tienden a procesar la información de manera más profunda y reflexiva. Analizan y reflexionan sobre sobre situaciones y experiencias vividas y observadas con mayor intensidad.

Sobre-excitabilidad sensorial

Los niños/as NAS son mucho más sensible a los estímulos sensoriales de su entorno que los no NAS, tales como luces intensas, ruidos fuertes, olores o sabores intensos o diferentes texturas.

Empatía

Los niños/as NAS suelen tener una mayor capacidad para sintonizar con las emociones de los demás. Pueden percibir y responder de manera más intensa a las necesidades emocionales de quienes les rodean, manifestando preocupación ante ellas.

Sensibilidad a los detalles

Los niños/as NAS tienden a notar detalles que pueden pasar desapercibidos por otros. Tienen una aguda sensibilidad a los detalles. Desde sutilezas en el entorno hasta cambios en las expresiones faciales.

Aunque la Alta Sensibilidad en sí no representa un problema, puede presentar dificultades específicos para algunos niños NAS en determinados contextos. Cada niño/a es único/a y la forma en que la Alta Sensibilidad se presenta en ellos/as puede variar. Aquí hay algunos problemas comunes que pueden aparecer en niños/as Altamente Sensibles:

Sobreestimulación: la sobreestimulación sensorial puede llevar a que algunos niños/as se sientas abrumados y estresados en entornos con estímulos intensos, como aulas ruidosas o lugares con mucha gente, por lo que les surge la necesidad de apartarse de estos espacios para calmar su nerviosismo.
Dificultades para adaptarse a cambios: los cambio en las rutinas o de entornos, pueden resultar todo un desafio para niños/as Altamente Sensibles, ya que, necesitan del control de las situaciones para sentirse seguros.
Sensibilidad a la crítica: los niños/as Altamente Sensibles pueden afectarle las críticas de los demás, ya que tienden a procesar las interacciones de forma más profunda y personal.
Problemas en la interacción social: estos niños/as con Alta Sensibilidad pueden ser más selectivos en sus relaciones sociales y pueden necesitar más tiempo adicional para sentirse cómodos en nuevos entornos y con personas que no conocen.
Necesidad de tiempo a solas: la necesidad de estos niños/as de períodos de tiempo a solas para procesar la información puede resultar signo de alarma si no se comprender adecuadamente, ya que, puede interpretarse como evitación social.
Dificultad en entornos educativos tradicionales: En ambientes escolares convencionales, donde hay un alto nivel de estimulación y se fomenta la interacción constante, un niño/a Altamente Sensible podría tener dificultad en adaptarse a este nuevo espacio escolar.
Intensidad emocional: las emociones intensas pueden llevar a cambios de humor rápidos y, en algunos casos, a una mayor vulnerabilidad emocional.
Autoexigencia: al procesar las experiencias de forma más profunda, los niños/as Altamente Sensibles pueden presentarse perfeccionistas y autoexigentes en sus actividades, lo que puede aumentar la ansiedad.

Crees que tu hijo/a puede ser Altamente Sensible?

Compruébalo en el siguiente test NAS:

Test para Niños Altamente Sensibles (NAS)*

La Alta Sensibilidad no es un trastorno, es un rasgo de la personalidad que está presente entre un 15 y 20% de la población. Los niños/as Altamente Sensibles NAS, tienen un sistema nervioso más desarrollado y reciben mucho más información sensorial que los niños no NAS, por lo que los convierte en niños y niñas con una mayor sensibilidad tanto sensorial como emocional.

Descubre si tu hijo/a es Altamente Sensible.

Escoge la opción que mejor describe a tu hijo/a sumando el puntaje correspondiente a cada respuesta (5 para la puntuación más alta si respondes "Totalmente de acuerdo" o 1 para la puntuación más baja si respondes "Totalmente en desacuerdo")